Parque Nacional Cumbres del Ajusco

Por Sonia González

El Parque Nacional Cumbres del Ajusco es uno de los pulmones más importante de la Ciudad de México, ubicado en la Carretera Picacho – Ajusco, Alcaldía Tlalpan, una amplia reserva que comprende un conjunto de parques, Totolapan, el Axosco, el Tepozán, la Cantimplora, el Tezontle, la zona de campamento Joya Chica y el parque ecológico la Rufina. Con una extensión de 920 hectáreas y 3 930 metros de altura sobre el nivel del mar, debido a su altura en temporada invernal se pinta de blanco.

El Ajusco proviene del nahuatl “Axochco”, que significa floresta de agua, es uno de los bosques más majestuosos, que forma parte importante del ciclo del hidrológico indispensable para el abastecimiento del agua de la Ciudad de México y parte de Morelos.

Fue decretado en 1936 por el presidente Lázaro Cárdenas, debido a sus serranías culminantes, constituye la división de las cuencas hidrográficas, que contribuyen a la alimentación de corrientes de los ríos, manantiales, lagunas, de los mismos valles, sosteniendo su régimen hidráulico, las cubiertas vegetales de este ecosistema, evita la erosión, mantiene el equilibrio climático de las regiones vecinas, siendo necesaria la protección de bosques, esta zona es vital para garantizar la estabilidad de las condiciones climáticas y biológicas.

Es una zona boscosa de pino, encino principalmente y vegetación inducida, sus paisajes son hermosos, sus relieves marcan esa serranía como monumento excepcional de belleza, grandiosidad dentro del sistema tarasco-nahua, elevadas cumbres, ubicado en la región del centro y eje Neovolcánico dan como resultado una gran diversidad de flora y fauna.

Existen especies micro endémicas como la víbora de cascabel transvolcánica, especies como el Colibrí berilo, Rascador cejas verdes, Rascador gorra canela, Zumbador Mexicano, Zorzal Mexicano, Culebra de Agua, Conejo de los volcanes, entre decenas más, abundan también los tlacuaches, musarañas, ratones, coyote, comadreja, zorrillo, gato montés, ardillas (del Ajusco y del pedregal), víboras, de las que se encuentran las especies de coralillo y cascabel y culebrita de agua; en los hoyancos de las cumbres hay murciélagos, muchas de estas especies endémicas o en alguna categoría de riesgo. Dentro de su flora destaca el oyamel, junípero, abeto, encino, ocote blanco amenazado en algunos lugares por la tala clandestina. Y una gran diversidad de hongos, insectos, líquenes.

Las cumbres del Ajusco forman un atractivo turístico importante, donde podrás practicar actividades como montañismo, ciclismo, prácticas de excursión, caminatas, senderismo, alpinismo, cuatrimotos, jugar gotcha, montar a caballo y hasta acampar en el albergue alpino, donde encontraras cabañas con cocina integral, chimenea, regadera, baños y servicio telefónico para cualquier emergencia.

Podrás degustar de tortillas hechas a mano, quesadillas, tacos de cecina, sopa azteca, sopa de médula, barbacoa, también puedes preparar comida de campo, encontraras un área con fogones, baños, juegos infantiles, vigilancia y estacionamiento.

En verano predominan las lluvias, aunque puede llover todo el año, el clima es templado, muy frio a partir de los 3 000 metros sobre el nivel del mar, y nevadas en invierno con temperaturas bajas, tenlo presente para acudir con la ropa adecuada.

Un bello lugar en la Ciudad, para disfrutar con amigos, en familia, en pareja, debido a la gran extensión, es recomendable ir acompañado.

Visita, cuida y disfruta de tu Ciudad.

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